EL GOBIERNO DE LAS MIGAJAS

El Gobierno de PSOE y Sumar ha iniciado el año 2025 decidido a demostrar para quien gobierna desde el primer día. En el primer mes del año ya ha conseguido aumentar la edad de jubilación hasta los 72 años de manera “voluntaria”. El hecho de que a cambio se premie a éstas y éstos voluntariosos septuagenarios, con mejores pensiones a cambio de poner en riesgo su salud no comporta un chantaje en absoluto, y si aun le cabe alguna duda, sepa usted que esta reforma es fruto del dialogo social entre la patronal y los sindicatos mayoritarios, como ha argumentado, medio avergonzado, Ernest Urtasun, el portavoz de Sumar que también ha votado a favor, igual que el PP, PNV, ERC, Coalición Canaria y UPN.

En cambio el gobierno, que aun no ha logrado aprobar los presupuestos generales, tampoco ha sido capaz, de momento, de sacar adelante el decreto “ómnibus” que aunaba diferentes medidas que aunque necesarias para la clase trabajadora llegaban tarde y mal. Entre ellas se encontraban:

– La subida general de las pensiones del 2,8% en 2025 y el aumento para las pensiones mínimas y las no contributivas.

– La subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y del ingreso mínimo vital (IMV).

– La prórroga durante los primeros seis meses de 2025 de los descuentos en el transporte público.

– La prohibición del corte de suministros básicos y de desahucios a personas vulnerables.

– Los recursos para las zonas afectadas por la DANA de octubre y para la reconstrucción de la isla de La Palma tras la erupción volcánica en 2021.

UGT y CCOO no tardaron en anunciar movilizaciones para el 2 febrero, se ve que en estas materias el “dialogo social” no ha resultado tan fructífero, pero lo hacen responsabilizando a las derechas por haber votado en contra, lo cual supone de facto, bailarle el agua a un Gobierno que ha tratado de sacar rédito político, en lo que ha parecido una jugada oportunista para desgastar a la oposición. Finalmente parece que Junts ha accedido a votar favorablemente en los próximos 30 días un nuevo decreto ómnibus que recoge el contenido del anterior, a cambio de que los socialistas tramiten la moción que presentó Junts solicitando que Pedro Sánchez se someta a una moción de confianza y que la Mesa del Congreso ha retrasado hasta en dos ocasiones.

Frente al oportunismo del Gobierno y la subordinación al mismo que muestran los sindicatos mayoritarios, resulta indispensable revitalizar el movimiento por las pensiones públicas y exigir responsabilidades a un Gobierno que amaga con la izquierda pero que no deja de golpear con la derecha a una juventud y a una clase trabajadora cada vez más exprimidas, por la patronal y los rentistas especuladores que están fulminando el derecho a la vivienda.

Precisamente para coronar esta cuesta de enero el Gobierno presidido por un Sánchez cada vez más debilitado por los casos de corrupción que no dejan de brotar en sus círculos más cercanos, ha decidido anunciar a bombo y platillo una batería de medidas que supuestamente vendrían a sofocar la lucha por el acceso a la vivienda que sigue organizando y sacando a las calles a cada vez más personas en más ciudades de todo el Estado.

Frente a una situación insostenible con la vivienda absorbiendo más del 50% de los ingresos familiares, las medidas anunciadas por Sánchez, lejos de sofocar la indignación, parecen una broma de mal gusto y vuelven a revelar al servicio de quien legisla este Gobierno. Entre las 12 medidas anunciadas por el Presidente destacan:

– Una exención fiscal del 100% del IRPF a los propietarios que alquilen sus viviendas siguiendo el índice de precios. Es decir, más dinero público a manos privadas, en este caso el de los rentistas que encontrarán una y mil fórmulas para seguir inflando los precios, pero además ahora, libres de impuestos.

– Se limita la compra de vivienda a extra-comunitarios, pero los fondos de inversión españoles y europeos que están comprando barrios enteros y echando a los y las inquilinas con décadas de antigüedad, seguirán dando rienda suelta a su especulación.

– Colaboración público-privada e incentivos para el sector de la construcción. Si Zapatero presumía de construir más pisos que Francia y Alemania juntos, Sánchez no quiere ser menos, ya sería mala suerte que le explotase la burbuja a él con lo poco que le queda en el convento, deberá estar pensando.

En fin, del resto de propuestas poco se puede esperar, pues ya estamos viendo las dificultades de este Gobierno para sacar adelante las migajas y eso es a lo que suenan las mejores de estas propuestas, a eso y a promesas vanas cómo aumentar el parque público de viviendas, cuando para simplemente igualar a Francia, no ya a Austria, en ese sentido, debería construir más de tres millones y medio de viviendas, cuando lo que debería hacer es expropiar sin indemnización los más de 4 millones de casas vacías que aun tienen los bancos a los que se rescató a fondo perdido con dinero público endeudándonos de por vida.

El Gobierno PSOE-Sumar arranca el 2025 recordándonos que es inútil depositar esperanza alguna en las instituciones del capital y que los y las trabajadoras y la juventud solo contamos con nuestra capacidad de organizarnos, de tomar conciencia de nuestra fuerza, de movilizarnos y de construir una alternativa política independiente que ponga nuestras vidas en el centro del debate y desahucie del poder a todos los oportunistas, explotadores, rentistas y especuladores, de una vez y para siempre.