LOS Y LAS ESTUDIANTES SE MOVILIZAN CONTRA LA CUMBRE EUROPEA

Desde Julio pasado el Estado Español ha asumido la presidencia de la Unión Europea y el próximo octubre, más específicamente, los días 5 y 6 se reunirán en un encuentro los gobiernos de la burguesía de la Unión Europea para continuar y avanzar en su construcción de la Europa del capital.

Una Europa en la que estos últimos años ha sido el responsable de que los datos de pobreza de nuestra clase, la clase trabajadora aumenten a un 21,6% de personas en riesgo de pobreza o exclusión social, mientras que los más ricos aumentan sus cifras hasta unos 2.500 millones de euros más al día.

Ha sido el actor principal también de todas las políticas anti-migratorias aplicadas en sus diferentes países estos últimos meses. Ha estado presente también con sus cuerpos de represión en la valla de Melilla donde 23 personas murieron asesinadas y aún hoy hay 40 desaparecidos y desaparecidas.

Es el protagonista de las noticias que anuncian hoy que el Estado Español deberá recortar ni más ni menos que 20.000 millones de euros en 2 años después de haber aumentado el gasto militar en un 26% llegando a alcanzar los 12.827 millones de euros presupuestados, el doble que lo destinado a Sanidad y Educación.

Y sobre estas miserias la juventud se ve especialmente amenazada

Esta juventud se ve obligada a atravesar unas políticas educativas en el Estado Español como son la LOSU (Ley Orgánica del Sistema Universitario) o la LCU (Ley de Convivencia Universitaria) que continúan con las líneas marcadas por la Unión Europea desde la salida del Plan Bolonia. Políticas y normativas que sirven a las ideologías dominantes y que ponen al estudiantado al servicio de las leyes del mercado. También políticas laborales juveniles, o, mejor dicho, la ausencia de éstas, haciendo así que la juventud continúe siendo mano de obra barata y sea quien tenga que aceptar los contratos y sectores más precarizados (en el mejor de los casos cuentan con contrato) y asumir unos costes de vida, esto es, de luz, agua, energía y alimentos cada vez más caros con un alquiler casa vez más desorbitado.

Con todo y con eso, es una juventud que siente especial sensibilidad hacia las problemáticas actuales del cambio climático y no es para menos. La destrucción total del planeta es hoy una actualidad, eso es conocido ya por todos y todas. Sin embargo, la Unión Europea continúa enmascarándose en su «Capitalismo Verde» transmitiendo una culpabilidad individual a todos y cada uno de los y las familias de clase trabajadora mientras personajes conocidos como el futbolista Neymar pueden permitirse aparecer públicamente haciendo uso de un gran avión para el sólo emitiendo a la atmósfera 32 veces más de lo que emite cualquier persona en todo un año para un viaje a Arabia Saudí. No deja de ser un «capricho» más a la lista que sólo unos pocos pueden permitirse por la clase social a la que pertenecen.

Entonces, ¿Dónde queda la responsabilidad y de quién? Los y las jóvenes lo tienen claro y así lo vienen expresando estos últimos años en las mareas climáticas que han vivido. No es posible hablar de «lo mal que lo ha hecho» la Unión Europea sin cuestionar de base el contexto internacional o global y el sistema, por tanto, en el que vivimos. Debe cuestionarse el modelo de producción asentado en todos los países para poder permitirnos un paso más adelante para poder revertir la destrucción del planeta.

Y, una vez más, la juventud y más en concreto los y las estudiantes no se han quedado calladas. Actualmente, en el marco de la asamblea de Cumbre Social Granada «Otra Granada, Otra Europa es Posible», hay ya convocatorias de asambleas y organización estudiantil en diferentes facultades de la provincia de Granada con perspectivas a lanzar una convocatoria específica de huelga estudiantil en las fechas más marcadas, así como otras acciones para mostrar su indignación y su rechazo total a esta Europa construida por y para continuar con la lógica del sistema capitalista. Estas convocatorias, lanzadas por la Unión Sindical Estudiantil (USE), junto con otros movimientos, dicen BASTA a esta Europa de miseria, guerras y explotación y lanzan iniciativas de reflexión política entorno a la Europa que como estudiantes quieren construir. Pero no se quedan ahí. Junto a esta convocatoria y su discurso del rechazo a la Europa del capital, suman otras reivindicaciones y críticas que específicamente se aplican al Estado Español y, concretamente, a la Universidad de Granada. Porque entienden que existe una responsabilidad por parte de este gobierno que asume políticas europeas para llevar a cabo políticas anti sociales, que desangran al sistema educativo público y que elimina cualquier forma de expresión política que se extrapole de las posiciones neoliberales asentadas en él.

Por tanto, desde IZAR apoyamos públicamente estas convocatorias y animamos al conjunto de la clase trabajadora y de la ciudadanía a no sólo animar a los y las estudiantes sino participar de sus acciones en sus asambleas de los días 20 y 21 de septiembre en todos los campus de la UGR y en la convocatoria de huelga estudiantil que se lance.